
ELOGIO DE LA LOCURA
“Diga lo que quiera de mí el común de los mortales, pues no ignoro cuán mal hablan de mí, la Estulticia, incluso los más estultos. Soy, empero, aquélla y precisamente la única que tiene poder para divertir a los dioses y a los hombres. Y de ello es una prueba poderosa, y lo representa bien, el que, apenas he comparecida ante esta copiosa reunión para dirigirles la palabra, todos los semblantes han reflejado de súbito nueva e insólita alegría...”
“Diga lo que quiera de mí el común de los mortales, pues no ignoro cuán mal hablan de mí, la Estulticia, incluso los más estultos. Soy, empero, aquélla y precisamente la única que tiene poder para divertir a los dioses y a los hombres. Y de ello es una prueba poderosa, y lo representa bien, el que, apenas he comparecida ante esta copiosa reunión para dirigirles la palabra, todos los semblantes han reflejado de súbito nueva e insólita alegría...”